¡Ay,María!
no te me pongas bravía
que ha sido un beso de hermano
el que le día a Rosalía,
casto,fino,puritano,
y esque el alma me partía
verla llorar cada día
por su marido lejano,
por pena nos abrazamos
y sin querer nos besamos
pero vamos,
para mí,
como besar a mi tía,
¡Ay,María!,
¿me acusas de lujurioso?
¡qué me dices!,injurioso
estimo tu proceder
sólo porque creíste ver
un acto libidonoso
en el beso que dí a Esther,
ese sí que fue en la mano,
¡imagina si era sano
que le resultó gracioso,
¡Ay,María!
fantasiosa mujer mía,
no me llames más infiel
por tocar algo de piel,
vale,sí,quizá fue teta
de tu amiga Maribel,
pero lo puedo explicar:
llevaba un camiseta
y una mosca pizpireta
a su escote fue a parar,
yo se la quise quitar,
que conste que si gemía
fue al notar mis manos frías,
no las pude calentar
y se helaba¡pobre mía!
¡Ay,María!
tanta porfía me agota,
y me deja cuerpo jota,
tanta duda duele hondo
y en la cama no respondo,
y aseguro,vida mía,
que si estoy corto de fondo
..se debe a que desconfías.
De todos los hombres que son infieles el cincuenta por ciento admiten serlo porque no se sienten correspondidos por sus parejas,
el otro cincuenta por ciento DICEN que no se sienten correspondidos por sus parejas.
MARGA M.R. mar 68-M.B.