Seré la voz que llame a tu silencio

Hoy me he vuelto a levantar tan ilusionado como entonces,
en verdad, no ilusionado por nada, pero bueno
no volveré a seguir esperando promesas por nada,
volveré a pintar de colores los horizontes que yo mismo me invente.
Trataré de callar las bocas que hablan más de la cuenta, a aquellos que me culpen y
de que se crean ellos menos inocentes.
Seré la voz que llame a tu silencio en silencio, entre par e impar ya salen las cuentas.
Estoy harto de seguir siendo yo mismo y de caminar a tientas.
Que te quede claro que los soles no se pintan en un día, si no en dos corazones,
en el tuyo y en el mío,
volveré, volveré.volveré probablemente a ser el mismo, a ser el huracán más cercano
a seguir confiando en mi mismo;
volveré a ser aquel poeta precoz, que con diecisiete años
se me quedara grande el nombre y la etiqueta.
No hay nada peor, que te quede claro, no hay nada peor
que sentir que nada tenga sentido, eso es lo peor que hay en la vida.
Poemas duros porque el día a día así me hizo ser, duro intentaré no ser,
cuando una mujer que me acabe de joder para así poder conocer a otra mujer.
Seguramente no nos perderemos en aquellas promesas que parecían tan cautivadoras,
mejor nos perderemos en las fábricas de los bulevares, de los sueños rotos,
aunque siempre seré el primero en fabricar ilusiones como excusa para seguir adelante;
ya lo decía Charles Bukowski "todo es una excusa para ir tirando".
¡Las luces de tus estrellas se clavaron en mi cielo!
pero yo no sabía que tú jugabas de día, y no me dí cuenta que jugábamos de noche,
pero tenía que haber pensado antes, al ser un iluso y
perderme en direcciones equiovocadas, en carreteras secundarias que no llevan a nada.
Repito: no hay nada peor que sentirse raro por haber dado todo por una persona,
perder todo, a la vez teniendo todo, pero como decía Jorge Bucay
los tres enemigos del amor son la verguenza, la culpa y el miedo y
aunque esto sólo sean palabars: no hay nada peor que sentir eso mismo.
©2011 Roberto Zarco.