Tu me enseñastes a dar
mis primeros pasos.
Tu con tu gran paciencia
soportastes mis llantos.
Tu con tu inmenso amor
me llenastes de abrazos.
Fuistes mi gran maestra
y mi fiel consejera.
No quiero que te marches
pero el cielo no espera.
Y ahora ya no estas,
dime que puedo hacer,
no se vivir sin ti,
¡ ya no te puedo ver !
A quien confio yo
ahora mis tristezas,
a quien pido consejo
¡ no se juntar las piezas !
¿Porque tanto dolor?
Sabes que estas conmigo,
tu fuistes la mejor
guiastes mi camino.
Aunque no estes aqui,
yo siento tu energia,
estas cerca de mi,
te quiero "MADRE MIA".
Esto es un triste sueño,
esto no es realidad,
y espero con anhelo,
que cuando al despertar,
volvamos a estar juntas
toda una" ETERNIDAD".