Soy tu cumbre,
verso infame de
algunos pasados
compañeros,
de tanta guerra
de guerrillero,
de tanta paz
de un te quiero.
Soy tu fiel
y leal cancerbero,
idealista por naturaleza
mentor de tus rodeos,
amante en seducción
manos de alfarero.
Soy tu eje
en la rotación
de tus senderos,
el cabal ilusionista
de tu piel
en mis canteros,
culpable de tu amor
inocente de la última
cofradía de aventureros.
Soy tu posesión
tu propio filibustero,
pirata por adopción
navegante de tus paseos,
labrador de tu cuerpo
en los sueños que no veo
y visión de tus embajadas
en los recovecos
de tus senos.
Soy tu imaginario
y real invernadero,
donde florecer en tu cuerpo
es remanso y aguacero,
permanecer en tus adentros
transcurrir en tus esteros
sitiarte por esta vida
y en la otra ser tu cielo!