Hoy, siento el tormento
de estar atrapado en la laberìntica
y estremecedora càrcel del miedo.
Allì todo es temor, persecuciòn,
profunda tristeza y terrorìfico miedo.
Miedo a ser, miedo a no ser;
miedo a los sinsabores del presente;
miedo al futuro incierto.
Miedo de tì, de mì, del entorno.
Miedo a los fantasmas del pasado;
Miedo al fantasma burlòn que en mi
presente se ha filtrado.
Miedo del dulce ayer que no regresa.
Miedo de mi juventud perdida.
Miedo a que el fantasma de ayer,
se transmute en una terrible realidad.
Miedo a estar enamorado de un fantasma.
Miedo a sentirme dèbil.
Miedo aperder mi tranquilidad.
Miedoa que se quemen mis alas
y no pueda remontar el vuelo.
Miedo a que me impongan;
que me digan lo que debo y lo que no debo.
Miedo a quedar atapado en tus redes.
Miedo a que dèbil ya, te ensañes con migo.
Miedo a que vengues en mì
los errores del pasado
Miedo al futuro que nos espera,
si en verad de mi te has enamorado.
Miedo de ti, de mi de todo cuanto nos rodea;
miedo de descubrir lo falso del amor que me has brindado.
Miedo aperder todo lo bello,
que me has proporcionado.
Miedo a que me dejes, pobre de mi.
Miedo a tu indiferencia y que me arrojes
al desvàn, cual trato viejo.
Miedo atener que acariciarte sin tenerte.
Miedo a tener que iniciar, la inevitable
carrera de los espectros.
Miedo a que te diluyas y tener que
borrarte de mi mente.
Miedo a que te desvanezcas de mis versos.
Miedo a tener que apartarte, pese a todo.
Miedo a que el espejo de la ilusiòn se vuelva trizas y sus pedazos cual testigo mudo,
queden esparcidos por el suelo.
Miedo de tì, de mì, del entorno.
Miedo a que en el futuro no seas màs
que un fantasma.