Tengo una moneda guardada
del año mil ochocientos,
una moneda anticuada.
La más antigua que he tenido entre mis manos,
se está seculando, se está colocando mohosa.
Tengo un libro guardado,
antiquísimo,
el más antiguo que he tenido entre mis manos,
se está deshojando.
Tengo un pañuelo guardado de seda natural,
de mi tatarabuelo,
el más antiguo que he tenido entre mis manos,
se está apolillando.
Tengo un amor guardado,
en mi corazón,
el más antiguo amor (el más precoz),
que he tenido entre mis manos...
y lo dejé escapar...
como el mago que echa a volar su paloma al cielo.
Pero, este amor sigue vigente
vive revoloteando, pleno de vida
en todos mis sentidos,
y en cada latido de mi corazón...