Vuelve presente en la memoria los múltiples fracasos,
vuelvo la cabeza, buscando explicación a tal empeño,
de los felices días llenas de esperanzas y de ensueños,
siempre vuelve oportunidades, al pasado venturoso.
Puntualmente me cuesta creer que aquellos anversos,
que surge, eran ocasiones para cambiar el rumbo,
o talvez son oportunidades de salir de los tumbos,
en que siempre estuve todo el tiempo inmerso.
Aunque es penoso siempre vuelvo en mi lugar,
como no queriendo tomar los que son mío,
es verdad, ¿quien no se aventura ante un desafío?
Porque mi ego y el tiempo me obliga a buscar
el mejor sendero, del presente o del futuro,
pero estoy aquí invariablemente, sin apuro.