Porque a tu lado la tarde monótona vuela,
Rauda como una bandada de ruiseñores, Que el viento bravío llevara,
Hacia latitudes tan vastas como riscos.
Porque la noche moja su ardor en el rio Y una luna llena desbarata el cielo, tan bello,
De inmenso azul, de hondo negro,
Que es necesidad mirar arriba y hacerle un guiño.
Porque la fatídica realidad de la vida Olvido
Y me enamoro nuevamente del brillo de tus ojos
Y alumbro un susurro en el alma tan profundo,
Que no es poesía sino algo mucho más intimo.
Porque todo es perfecto cuando te miro.
La pena ríe y seca el llanto de cuando no vivia.
Así quiero yo estar siempre contigo,
Que el porqué de mi amor sea solo tu alegría.