Teatro de Sombras Condicionales

Aplauden con las manos que ayer lanzaron piedras,
sus sonrisas son máscaras de yeso recién horneado.
Dicen "aceptamos" pero en el sílabario del miedo,
tu nombre sigue siendo error ortográfico.

Invitan a su mesa con cucharas de bronce,
mientras esconden el veneno en los pliegues del mantel.
Brindan por el amor... si cabe en sus espejos,
si no mancha la pureza de su invierno perfecto.

Celebran tu existencia como flor exótica,
pero podan tus raíces cuando crecen hacia el sol.
Su tolerancia es mapa con fronteras de hielo:
avanzas un paso y sientes el frío de su "hasta aquí".

Guardan Biblias abiertas en la página del odio,
y cierran los párpados cuando pasas con tu verdad.
Hablan de inclusión con vocabulario prestado,
mientras sus prejuicios mudan de piel como víboras.

No quieren tu esencia, sino tu silueta discreta,
un cuadro en su museo de causas bien vestidas.
Te aman en abstracto, te odian en los detalles:
en cómo tu valentía les recuerda sus cobardías.

Hoy rompo el guion de esta comedia funesta,
no necesito monedas de afecto a interés variable.
Mi amor no es limosna ni trofeo de su consciencia:
soy rayo que desnuda la noche de sus banderas.