Tan impenetrable, tan fuerte, tan dura
parece la roca, que siempre espera que
el mar llegue a embestir con sus aguas
sobre ella, queriendo vencer su postura.
Una y otra vez entra con furia, buscando
penetrar esa masa terrestre de minerales,
para pasar libre y llegar a destino, sin piedras
que impidan que bese la orilla con su espuma.
Roca que cree que por ser fuerte, podrá vencer
al mar, que día a día llega con ímpetu y grandeza,
con un espíritu inquebrantable, siempre constante.
Sin desfallecer, hasta sentirse libre sin más piedras.
Que siempre existieron en su camino, impidiendo,
que sus aguas abracen la orilla dorada que espera
ilusionada, ser acariciada por su inmensa grandeza.
Dueña absoluta de sus playas soleadas y tan libres.
Tú, que crees ser más fuerte que nadie, no sabes
acaso que cuando gota por gota por más pequeña
que sea, se une, se forman grandes océanos, tan
grandes, que ninguna roca puede embestir sus aguas.
Horizontesazules
04/03/2019