Poema n.° 50. Esperanza

Poema n.º 50

ESPERANZA

I

¿Por qué dar paso a la depresión?

¿Por qué dar paso a la desilusión?

¿Por qué no canalizar nuestras acciones

contando todas nuestras bendiciones?

II

Mientras haya vida hay esperanza

si decidimos por el amor y la templanza,

si depositamos nuestra fe en Dios y elevamos alabanza

de seguro que la felicidad ansiada nos alcanza.

III

Jamás renunciemos a nuestros sueños,

de nuestro destino somos los únicos dueños.

Materialicemos nuestros más caros anhelos

con confianza y alegría, sin penas ni duelos.

IV

Cada amanecer, al despertar,

salgamos al mundo a conquistar,

que nadie nos robe la ilusión

de vivir con pasión y convicción

V

La vida es demasiado corta y compungida

para invertir en dolor, llanto o melancolía,

decidamos ser felices HOY día,

y al futuro, contentos, demos pues la bienvenida.

VI

Debemos por nuestros ideales siempre luchar

y  en ese combate nunca cesar.

La equidad y la justicia permanentemente deben brillar

 y por ellas, de pie, tenemos que trabajar.

VII

La verdad y solidaridad deben ser nuestra bandera,

defendiéndolas fervientemente de la mejor manera;

es así como elijo vivir,

peleando por mis ideales es como deseo morir

Poema n.º 50

ESPERANZA

I

¿Por qué dar paso a la depresión?

¿Por qué dar paso a la desilusión?

¿Por qué no canalizar nuestras acciones

contando todas nuestras bendiciones?

II

Mientras haya vida hay esperanza

si decidimos por el amor y la templanza,

si depositamos nuestra fe en Dios y elevamos alabanza

de seguro que la felicidad ansiada nos alcanza.

III

Jamás renunciemos a nuestros sueños,

de nuestro destino somos los únicos dueños.

Materialicemos nuestros más caros anhelos

con confianza y alegría, sin penas ni duelos.

IV

Cada amanecer, al despertar,

salgamos al mundo a conquistar,

que nadie nos robe la ilusión

de vivir con pasión y convicción

V

La vida es demasiado corta y compungida

para invertir en dolor, llanto o melancolía,

decidamos ser felices HOY día,

y al futuro, contentos, demos pues la bienvenida.

VI

Debemos por nuestros ideales siempre luchar

y  en ese combate nunca cesar.

La equidad y la justicia permanentemente deben brillar

 y por ellas, de pie, tenemos que trabajar.

VII

La verdad y solidaridad deben ser nuestra bandera,

defendiéndolas fervientemente de la mejor manera;

es así como elijo vivir,

peleando por mis ideales es como deseo morir

p. AB. BRIGETTE FARFÁN BENITES

Magister en Ciencias Internacionales y Diplomacia

Todos los derechos reservados a su autora

www.rincondepoesia.com

Guayaquil, El Ecuador, Sudamérica

Septiembre 7, 2013