Quiereme con todos mis defectos, con mis pocos argumentos, con lo loco de mis sueños que no te dejan de pensar. Quiereme con la fuerza de los mares, con el ímpetu del viento que forman olas en su encuentro y la marea que viene y va. Quiereme con la paz de las montañas, en el silencio y en la calma hasta que no quede nada sin un toque de tu amor. Quiereme en la risa y en el llanto, en los triunfos y fracasos, nunca te alejes tanto que no te pueda ver. Quiereme en el dolor de una caída, en el abrazo de una despedida, estes despierta ó estes dormida, en la lágrima que se marchita; quiereme hasta morir.... Autor: Martin Lunary