Estoy cansado de las noches eternas,
Pensando en que cosa te haría hacer sentir,
La mujer más amada, la más feliz,
Y esperando a que duermas.
Intenté amarte sin ninguna limitante,
Sin que me importará para nada el pasado,
Pero no puedo olvidar que fui el amante,
Que tu corazón ya ha olvidado.
Intenté olvidarte todas las mañanas,
Me lave los labios para olvidar tus besos,
Escombré mi cuarto para borrar tus mañas,
Pero no fueron suficientes ni los rezos.
En verdad que ya no sé qué hacer,
Tengo enredados los sentimientos,
Te juro que he hecho cuatrocientos intentos,
Para olvidarte, para dejarte de querer.