un sueño, más allá de lo tangible

te miro y es como si de pronto mirara un sueño
de esos sueños vagos casi intocables.
Qué te hacen crear un sin fín de imaginaciones inhóspitas.
que nos llevan al climax de pasión sin fin
llena de angustía metalizada
pero que al final, se convierte en eso sólo en un sueño
un maldito sueño que arranca la piel, como granada de otoño, que gime a placer que ubica los sentidos fuera de cualquier orbita que dure más de diez miseros minutos
en un planeta que apesta por la maldita envidia y los malditos juegos de ocio
pero... ¿qué demonios soy?, si no un punto más en un espacio cideral
soy tan sólo una molecula llena de ideaz confusas y sueños frustrados
te necesito, necesito tu olor para respirar.
tu puta droga de aliento para vivir y tu maldita manera de hacerme el amor.
para morir, para poder morir sin remordimientos.
para poder jugar al mismo tiempo.
te necesito más allá de lo todo imaginable, de lo todo creado.
más de lo que yo pueda soportar más de lo planeado.
sentir tus labios, afilados perforando dramaticamente mi agonia
sentir el contacto de tu piel, sin ningún recelo llevandome al orgasmo
sin tregua sin permiso
pero al final, todo lo imaginable se desvaneces, se pierde
no sin antes recordarnos que al despertar todo se queda gravado
y aunque gima de placer al recordarlo
nada es más cierto que al levantarte,
el sueño se convierte quizás en el recuerdo más sarcasticamente ideado
y me hace recordar a fin de cuentas que no somos nada
y que el deseo de poseerte es tan vago y frustrado como un deseo estupido de poder decir
te amo sin culpa alguna
pero estoy muerta llena de recelo y rencor
llena de odio hacia mi
por no poder quitarme tu esencia
y más que nada por no comprender
que aún deseando como te deseo, amandote
y no querer despertar los sueños son eso
sólo sueños