Amarte es tomar el gusto salado del sudor,
que emana por tu piel cuando hacemos el amor,
oír en mis oídos, el suave murmullo de tu voz,
amarte es ver cada día en tu boca, esa dulce sonrisa,
en tus labios que me enamora y embelesa.
eres mi bella diosa de amor, mi Venus del Olimpo.
Ganas eufóricas de besarte mi corazón sentía,
mis manos y mis dedos que ganas de tocarte tenían y
amarrarte a mi cuerpo o entrelazarte en mis brazos,
mi mente solo pensaba en poder mirarte y
por la noche con ternura y pasión mi corazón amarte.
A tus ojos solo deseo poder mirarte,
para que los míos mirando sobre los tuyos
con amor, te digan amor, que ganas de
amarte tengo y mi corazón de poseerte y
decirte que por tu amor mi vida daría.
Nuestros cuerpos ardientes y entrelazados.
desenfrenados al deseo de amor y lujuria,
con nuestros labios unidos, llenos de frenesí,
como mecidos para buscar el dulce placer.
Veo a lo lejos la mirada de tus bellos ojos que,
me hechizan, me cautivan y veo que eres tú,
esa hermosa mujer llena de ti, con tu dulce amor,
me enamoras locamente y pierdo el sentido,
eso sí es amor, tu amor al cual caigo rendido,
a ti, a tu adorado amor que reconozco que,
eso si es el amor verdadero.
De ese maravilloso perfume aromático que
desprendía ese, tu delicado y bello cuerpo
desnudo que me extasiaba y me excitaba,
en cada momento que a mi lado estaba,
te amaba con pasión y en tu cortado suspirar,
yo lograba elevarme hasta el éxtasis.