Tallaste tu obra....en mi curvatura altisonante,
vieras que óleo de tus manos surgía
un huracán de estigmas suaves y constantes,
de acuarelas puras mi cuerpo cubría,
miraste mi piel, razones que perseguían,
la noche de estrellas, en tus ojos radiantes,
un manto perpetuo de olores permitía
quebrar la ternura en átomos palpitantes,
que tus manos quemaban, si, lo entenderías,
capullo de fuego, en mi sexo mutante,
colores de aurora, que encenderían,
tu vientre de abriles...mi halo brillante,
que deseo que jamás te atreverías
a partir con tus gemas, pubis diamante,
a un gemido etéreo, el griterío de vivas
porciones de éxtasis, de fino talante,
tallaste tu obra....y es como lo querías,
con volcán y pasión, en supuestos instantes,
partiste mi boca....con lengua que hervía
aborviste mi alma...bebiste..saciaste...
y ahora me tienes, pequeña ermitaña
junto a tu burbuja de otros pasados,
sabiendo que amaste y amas la extraña
codicia de hombre, que entrego en tus manos.