Perdóname, por mirarte miles de veces y no reconocerte
por imaginar que eres tan mía como mi alma, y no tenerte.
Te pido perdón por ser capaz de amar, y no poder darte mi amor
por ser capaz de hablar, y no decirte la verdad.
Si supiera que al acostarte piensas un segundo en mí
y al levantarte susurras mi nombre, acariciando tu almohada.
Solo así me atrevería a mirarte a los ojos sin cerrar los míos
y todo el temor hacia ti, se alejaría por siempre y para siempre.
Pero como saber si en tu mente existen células de mi vida
y al mirarme, tus ojos se conectan con tu corazón.
Como saber que decirte, si no conozco mis palabras hacia ti
y al escucharme, solo son excusas de lo que no puedo decir.
Perdóname por todo el tiempo que pasó y que no volverá
por estar contigo horas, sin compartir siquiera un segundo.
Perdóname, por ser como soy, y no como desearía ser
por decir ahora, lo que debí decir hace tiempo.
Te pido perdón por este momento tan lejano a nosotros
por pedir tu piel, cuando ya es de otro.
Perdona mi temor, perdona mi vida, y perdona a mi amor
perdóname por favor, pero no me lo digas, que intento olvidarte.