Fuiste para mí como tierra seca
que se negó un día a dar su fecundez
fuiste como un río cuya agua no cantaba
como fuego sin llama, como día sin sol.
. y aún así te amé.
Fuiste tan ruin, que me robaste la risa
nunca mostraste tu verdadero corazón
y yo tan engañado, consolaba tu miedo
sin saber cuanto me harías sufrir
. y aún así te amé.
Caí en los peores errores cometidos;
por ti deje a mi madre y amigos, me olvidé
de las cosas más simples, me olvidé de vivir
. y aún así te amé.
Hoy, después de haber sufrido ¡Imagínate tú!
he recibido tu carta, donde te burlas de mí
pero el amor que te guardo, me hizo olvidarlo todo
y aunque me hiciste mucho daño, aún así te amaré.
Marco Senmache Rodríguez - Perú