Y supo entonces que se llamaba amor, Y levanté mis ojos a ti nombre, Tu alma vio el amor de un hombre; Pero en este cuento solo yo muero, Porque te Quiero con lágrimas y alegrías. De tanto amor mi vida se tomó de luto Y fui de rana en rama como un colibrí Hasta llegar a tu ventana amiga mía. ¿No sentiste un suspiró de corazón quebrado? No es culpa de tus ojos este llanto, Tus manos no clavaron esta espina, No buscaron tus pies este sendero, Pero de alguna forma tú, solo tú, Fuiste matando mi corazón.
No sentiste un suspiro de corazón quebrado? Muy bien Carlos Rafael. Excelentes versos