Un hombre tan distinguido de
vino y cigarrillos, una mujer
tan especial, casí una reina
sin coronar.
Es la vida de un quizás o
la historia de un tal vez;
entre cuatro paredes sólo
existe sexo y piel.
Son amantes a la inglesa
porque ambos tienen pareja,
nadie sabe, nadie se queja;
sólo un colchón escucha la voz
y aspira el sudor de dos cuerpos
jadeantes de amor.
Un amor tan clandestino
que la sociedad no puede permitirlo,
un beso muy escondido, no los
ha visto ni el vecino; un trato
tan respetable, que en vez de
amante ella parece su madre.
Pero todos lo viernes cuando se
apaga la luz y a oscuras queda
el amor, pequeña se hace la
habitación, las cuatro paredes
respiran pasión.
Son amantes a la inglesa
porque ambos tienen pareja;
el aire de un ventilador es
testigo de un inmenso amor
prohíbido.
Y cuando da las once el reloj
se termina la función de hoy,
cada uno vuelve a su casa a
seguir viviendo hasta el otro
viernes con la máscara del dolor. Autor : Martin Lunary