Hace ya muchos ayeres,
que tu ojos se abrieron,
por vez primera luz vieron,
que tu no lo recuerdas.
Que tu faz iluminó la vida,
de aquellos que no te esperaban,
pero sorpresas la vida les regalaban,
cuando tu cuerpecito nacía.
Que bonito es imaginar ese momento,
cuando apenas eras un pedacito de carne,
y ver a la mujer que se robó mi sentimiento,
sin llevar en las venas la misma sangre.
Quisiera alcanzarte en el tiempo,
y tener muchos corazones en mi lado izquierdo,
para regalarte uno en cada cumpleaños,
pero solo tengo uno, y ya te lo he regalado.
FELICIDADES