Te soñé anciano, sostenido tu cuerpo por un bastón.
Te soñé muy feliz, compartiendo mis días,
y en el sueño, para mi también habían pasado los años.
Recorrimos juntos, tomados de las manos,
cada uno de los rinconcitos, que fueron testigos de nuestro amor.
Como habíamos cambiado! Era un nuevo desafío que la vida nos ponía, debíamos atravesar todos, sin dejar nada en el camino.
Construimos una vida nueva,
desde el momento que solos quedamos,
las hijas ya se han marchado, nos aferramos al amor, a aceptarnos como somos.
El ayer lo dejábamos atrás, caminábamos hacia delante, nos propusimos soñar…total no cuesta nada!.y ya ves!…nunca dejamos de soñar.
Dejamos que una varita mágica nos tocara y nos iluminara de amor.
El pasado ya fue, hoy debemos esperar que llegue mañana, ese mañana que tanto anhelamos.
Buscamos un rayo de luz, que siga iluminando nuestro sendero y nos conduzca a llegar a viejitos…muy viejitos, juntos , amándonos.
Creí soñar que estábamos viejitos, pero era una realidad, no era un sueño