La condición humana es vil

Si pues,

el incoscente desnuda

lgnorancias, ingratitudes y las maldades.

Desnuda miserias de la comodidad

del sentirse poderoso sin luces

ni riquezas por mostrar.

Desnuda celos, envidias, mediocridades

y allana el camino del destierro

triste final de los vates.

Ideales, utopías quédense allí

donde nadie los asalte con mentiras

o los apuñale hasta el fin.

Desnudos todos la verdad sale a la luz

y entonces la sinceridad incia un exodo

el vate es expulsado ¡Por fin!

Ya nada será igual,

ni las mentiras piadosas

ni los bellos recuerdos, nada.