La verdad es que no estoy,
disponible para el amor,
no se a veces a donde voy,
me gana este dolor.
No soy ya el indicado,
para aconsejar de nada,
tengo una daga aquí clavada,
y me siento sofocado.
Ese pasado que me mata,
que me calla y me deja así,
porque hay algo que me ata,
a seguir pensando en ti.
¿Donde estas? no regreses,
no te pido que me tengas piedad,
pero espero a que me beses,
y te lleves la soledad.
No te pido que vuelvas,
pero es que ya te extraño,
y ha mi vida le hace daño
respirar, desde que no estas.