Después de tantos años, tantos días,
en los que el alma gritaba de dolor,
en donde el corazón pasó noches frías,
el resultado de un mal amor.
Hoy me siento desprendido de ti,
las horas ya tienen sesenta minutos,
y estos de infinitos segundos.
Tu estás lejos y yo sigo aquí.
No preguntes de lo que es mi vida,
ni como estoy, porque no te diré la verdad,
yo no quiero convertir esto en tempestad,
no te diré que mi alma está perdida.
Me da mucho gusto que te vaya bonito,
que seas la mujer más feliz del mundo,
pero quererme algún día, ha sido tu error único,
porque en tu vida solo fui un fracaso rotundo.