Tu partida provoca procesión infinita de humedad
mi alma se hace jirones mas, no he de llorar.
Difícil trance el entender que debo dejarte ir
abandonas tu redil por cumplir con tu destino cruel
Pérfidos designios te visitan y se quedan cambiando tu suerte
aunque lo deseo con vehemencia , se, que no puedo retenerte.
Debes emprender el vuelo, y aprender a ser valiente
tendrás que enfrentar tus batallas, armándote de fe y coraje
materializar tus anhelos, cumplir lo que soñaste.
Confías en un milagro, pues confiaré yo también
que volverás triunfante, logrando vencer.
Yo te estaré aguardando, en la vera del camino
y serán mis brazos lo que te reciban ¡por que eres mi Amigo!